Incendios forestales y salud

Los incendios forestales suponen un peligro no solo para los animales y las plantas, sino también para el ser humano, debido a la liberación de dióxido de carbono.

Respecto a la salud, la contaminación del aire que se deriva del calentamiento global puede producir consecuencias adversas como problemas respiratorios o infecciones.

Inundaciones

El aumento del nivel del mar y la subida de la temperatura suponen un incremento de las precipitaciones en determinados lugares, en los que se producen inundaciones. Muchas ciudades costeras están situadas bajo el nivel del mar, por lo que el riesgo de inundaciones es alto.

Sequía

El aumento de la temperatura es responsable de la escasez de lluvias y la sequía. La sequía supone la degradación de zonas áridas, semiáridas o subhúmedas secas como consecuencia de cambios en el clima y de la actividad humana. En África la situación es muy grave. En 2009, en el Cuerno de África, se produjo una de las mayores sequías de la historia y más de dos millones de personas tuvieron que abandonar sus casas.

Materiales reciclables

Elige productos que vienen en envases de vidrio y no los de plástico, ya que tienen mayor capacidad de ser reciclados. Evita aquellos alimentos que vienen en bandejas de telgopor expandido, son mucho más contaminantes y tienen mayor predisposición a su quema con los rayos del sol.

En los supermercados busca bolsas de papel en vez de bolsas plásticas, esto ayudará a que vayan empleando este mecanismo de almacenaje contribuyendo al cuido de todo el medio ambiente.

Iluminación

Más del 10% de la energía está dedicada exclusivamente a la iluminación; por lo que recurrir al uso de lámparas ecológicas o lámparas de bajo consumo energético favorece. Estas prolongan los períodos de recambio de las bombillas. También puedes colocar un sensor de movimiento para el encendido y apagado automático.

Uso de fertilizantes

La superpoblación de la Tierra plantea nuevos retos, entre ellos el de la producción de alimentos. La gran mayoría de las empresas de la industria alimentaria emplean fertilizantes para aumentar los niveles de producción de alimentos. Estos fertilizantes están elaborados a base de óxido de nitrógeno, que es más perjudicial que el dióxido de carbono, y generan daños adicionales en los propios campos de cultivo. A largo plazo, se convierten en zonas yermas y desérticas. Muchos desplazamientos en el mundo también se pueden explicar por el uso excesivo de este tipo de fertilizantes y elementos químicos en la agricultura.

Deforestación

Los árboles desempeñan un papel importante en el equilibrio medioambiental, ya que convierten el dióxido de carbono en oxígeno. Al haber menos árboles, tal como sucede en regiones como el Amazonas, los niveles de CO2 en la atmósfera aumentan y favorecen el deterioro de la capa de ozono. Además, la calidad del aire que respiramos empeora, sobre todo en grandes centros urbanos o zonas industriales, generando enfermedades de tipo respiratorio y cardíaco.